miércoles, 4 de noviembre de 2009

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Todo se sostiene en un contenedor rajado, se sostiene de hilos finitos a casi cortarse.
Se vuela en espacios inexistentes, se difumina entre colores mesclados, todo se va yendo hacia los costados, hacia arriba y hacia abajo,
ya no hay limites que corten la huida tremenda que se escapa para contraatacar al tiempo, para robarle agujas y un tic tac. el ultimo, ese que ya no está. le roba al tiempo que sale corriendo, que le teme y deja de funcionar.
El insoportable tic tac esta noche dejará de sonar, porque ya no habrá mas cielos negros, las estrellas flotarán entre multicolores perfectos y los días serán una perfecta sintonía de estos cuerpos que avanzan en el nuevo universo, donde la esencia es lo único real, lo unico que tiene peso y un lugar donde echarse a descansar, donde un ruido externo entra en lo profundo de cada cuerpo y empiezan a vibrar paredes, pisos y techos, salpicando luces y sonidos que confunden realidad de irrealidad. Luces como armas y poesías como discusión.
Se han ido las fronteras y ah huído el mapa de él mismo.
El ruido ahora entra y sale de lo único que es, toda una esencia, una vibración, mas tarde estático y un choque final entienden que todo fue ilusión, una utopía de canción que se puede tocar.

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